Bajo la consigna "necesitamos un transporte Público de Calidad para ir al trabajo, a la escuela, al hospital, a la universidad para ir a visitar amigos, amigas o familiares", la Asamblea vecinalista sigue apostando a la movilización ciudadana para intentar hacer oír sus reclamos al municipio ante el incumplimiento sistemático y a esta altura (puede decirse) vitalicio, de las empresas concesionarias del servicio.
La semana pasada se manifestaron frente a la Escuela Hogar, con la intención de escuchar a los vecinos y potenciar los planteos que, hasta ahora, siguen sin solución. Este viernes habrá una concentración en la zona sur de la capital provincial (Avenida de las Américas y Ramírez) y para las próximas semanas tienen previstas reuniones y diferentes iniciativas en San Benito y bajada grande.
En un documento que hicieron público por distintas vías, la organización vecinalista da cuenta de los incumplimientos por parte de Buses Paraná SA de numerosas obligaciones previstas en la normativa vigente (ordenanzas 9.462 y 9.546), con respecto a las frecuencias; las condiciones de seguridad, higiene y confort en las unidades; las medidas de seguridad, información y control mínimas para una espera saludable en las paradas; la antigüedad promedio de 6 años en las unidades; un mínimo del 20% de su flota con sistema de accesibilidad para personas con discapacidad; la posibilidad de conocimiento por parte del usuario del tiempo de espera en una parada; implementación del municipio de un área para recepción de reclamos; auditoría a la empresa prestataria del servicio y, en caso de "grave incumplimiento de las obligaciones esenciales", caducidad del contrato según lo previsto en el artículo 88 de la Ordenanza 9462.
"Gobernantes impermeables" y participación ciudadana
Previo a la protesta prevista para este viernes, Río Bravo dialogó con Esteban Rossi, uno de los integrantes de la asamblea que, desde hace años intenta hacer escuchar sus planteos en busca de una respuesta a un problema que atraviesa gestiones y sigue sin resolverse.
Consultado respecto de qué perciben en su encuentro con los vecinos en esta suerte de gira de encuentros, reuniones y protestas que decidieron impulsar, expresó: "Coinciden con nuestro diagnóstico en cada barrio que vamos. Muchas veces el devenir del día a día hace que estén resignados a manejarse como pueden. Frente a todas las cuestiones que vivimos día a día con el transporte público, la gente es como que se ha resignado pero claramente lo sufre todos los días".
"Manejarse como se pueden" implica que los habituales y potenciales usuarios del sistema de transporte resuelvan la movilidad con un auto, una moto, organizándose con sus parientes, vecinos, subiéndose a un mismo auto, tomándose un remís o con una bicicleta. Sin embargo, eso tiene sus consecuencias porque "carga a la vía pública de una cantidad de vehículos que aumenta la siniestralidad y la violencia en las calles", alertó el vecinalista.
Por eso, la principal apuesta es a la organización ciudadana: "Nosotros lo venimos viendo hace tiempo, tenemos un diagnóstico pero nos interesa saber cómo la viven, cómo la resuelven los vecinos todos los días. Acá no hace falta solamente tener argumentos, tener razón y poder plantear con cierta coherencia un argumento frente a los gobernantes porque claramente son impermeables frente a estas cosas", señaló Rossi.
La intención es trascender los límites de la propia asamblea, que ya de por sí es expresión de un conjunto de organizaciones y barrios de la ciudad, para lograr "una organización más amplia", "gestar cuestiones diferentes desde la organización popular", para potenciar el reclamo frente a esas situaciones que los vecinos ven, con un claro objetivo: "Que tenga una resolución definitiva, no que se venga emparchando, que aumenten el boleto y que siga empeorando el transporte porque nosotros entendemos que el sistema de transporte público de pasajeros es un derecho central de todos los ciudadanos y ciudadanas que tiene impacto muy fuerte sobre otros derechos. Si nosotros no podemos tomar un colectivo no podemos llegar al trabajo, no podemos llegar a la escuela, al hospital, la universidad. El derecho a la salud, a la educación, al trabajo se ven directamente afectados por la falta del transporte público".
Publicado en Río Bravo el 17 de marzo de 2023