Los trabajadores despedidos pedían la doble indemnización, pero la empresa se mantuvo firme en su propuesta del 20% extra sobre los montos que corresponden por Ley y no accedió a considerar el 75% que presentaron los delegados como segunda opción luego de una breve asamblea. "El plan de lucha sigue, los trabajadores quieren una indemnización aumentada y la oferta de la empresa fue insuficiente", dijo el secretario general del Sindicato de Comercio, Daniel Ruberto.
Con la conciliación obligatoria vencida desde el viernes y las partes liberadas, al hermetismo de la empresa se le sumó un nuevo factor de preocupación para los empleados: directivos se presentaron con un arquitecto y tomaron fotografías en la sucursal sin brindar información. "Molesta porque no hay información de nada; pareciera que lo hacen con ánimo de sembrar terror", dicen los trabajadores.
La secretaría de Trabajo dispuso la extensión de la conciliación obligatoria por cinco días hábiles, luego de que la firma de capitales trasandinos comunicara su intención de no cerrar el local. No obstante, plantearon que realizarán "una readecuación", que implicaría reducción de personal. Los trabajadores y el Sindicato de Comercio piden que, en ese caso, se otorgue doble indemnización y traslados a otras sucursales a los trabajadores y trabajadoras que estén dispuestos.
Mientras se desarrollaba la audiencia convocada por la secretaría de Trabajo por el informal anuncio de cierre de la empresa de capitales chilenos, trabajadoras del hipermercado supermercado Vea de Paraná, conversaron con Río Bravo. Dejando entrever la angustia y la incertidumbre reinante, aseguran que la decisión las tomó por sorpresa y que el volumen de ventas no hacía prever semejante desenlace.
Ante el anuncio de cierre de la firma, que dejaría en la calle a 60 trabajadores, la secretaría de Trabajo de Entre Ríos dictó la conciliación obligatoria hasta el 5 de agosto: no podrá haber despidos ni medidas de fuerza. "Van a buscar alternativas porque hay un grupo inversor que está interesado", dijo a Río Bravo el secretario general del Sindicato de Empleados de Comercio, Daniel Ruberto, que pedirá al gobernador que intervenga para evitar el cese de la fuente laboral.